Para los amantes del turismo y de la naturaleza que quieran alejarse de los lugares más concurridos, este destino es una buena opción de escapada. Gorafe es un pueblo con encanto, situado a pocos kilómetros de Baza, Guadix y Granada capital, y su desierto ofrece muchas posibilidades para encontrar paz y tranquilidad.
El desierto ofrece una panorámica impresionante, una multitud de colores que cambian a cada hora del día: ocres, rojos, amarillos… y un silencio total que nos descubre el misterio de la vida.
El paisaje
El impresionante paisaje del Desierto de Gorafe se divide en dos grandes áreas. La primera es conocida como los Bad lands (tierras malas) y consta de cañones, barrancos y chimeneas que recuerdan a la Capadocia turca. La segunda, más alejada del núcleo urbano, se conoce como Los Coloraos, con grandes cañones de arcillas rojas que nos recuerdan al Gran Cañón del Colorado norteamericano.